El jueves 15 de noviembre, en la ciudad de Paraná, organizamos, a través de nuestra Red de escuelas y organizaciones para una cultura de paz, la jornada “La salud del docente” a cargo del Lic. Fernando Rossi. Participaron 80 personas de la ciudad capital y de distintas localidades cercanas como Oro Verde, San Benito, Aldea Brasilera, General Ramírez, Viale, Crespo, La Guardia y Colonia Avellaneda.
El jueves 15 de noviembre, en la ciudad de Paraná, organizamos, a través de nuestra Red de escuelas y organizaciones para una cultura de paz, la jornada “La salud del docente” a cargo del Lic. Fernando Rossi. Participaron 80 personas de la ciudad capital y de distintas localidades cercanas como Oro Verde, San Benito, Aldea Brasilera, General Ramírez, Viale, Crespo,La Guardia y Colonia Avellaneda.
El Lic Fernando Rossi dio inicio explicando las características de los espacios en los que interactuamos. Cada vez que entramos en un lugar sentimos algo que la psicología llama campo emocional. Este campo está ligado a la salud o a la enfermedad y nuestro cuerpo nos puede indicar si nos favorece o nos perjudica.
Luego presentó los conceptos de la pedagogía sistémica que parten de las constelaciones familiares de Bert Hellinger, quien argumenta que en las relaciones primero está el orden y luego el amor. Si hay orden, el amor puede fluir entre todos los miembros de una familia o grupo, en cambio, si está desordenado, los vínculos se ven afectados. Se trata de entender a los sistemas familiares como una totalidad en la que nadie puede ser excluido.
Al nacer no sólo traemos la información física, sino también la historia de nuestro sistema familiar, del cual podemos heredar una emoción como el dolor.
En el caso de empresas o instituciones educativas, podemos ver que funcionan como una totalidad: si se echa a algún miembro, todas las relaciones se resienten. Cuando podemos reconocer al anterior o al excluido, agradecerle lo que dio a esa institución, el sistema puede sanarse.
¿Cómo podemos incluir a todos los miembros y ordenar los sistemas? Incluir es darle un lugar a esa persona sin juzgar sus acciones. En el caso de nuestros padres, agradeciendo todo aquello que nos dieron. Si los niego, pierdo mucha fuerza para hacer mi propio camino, de allí que la única manera de transformar nuestra vida es aceptar nuestra historia tal cual fue.
¿Cómo crear ambientes de aprendizaje saludables?
Fernando Rossi destaca que para crear un ambiente saludable, que facilite y promueva el aprendizaje, es necesario vincular ese campo de aprendizaje con emociones positivas y de apertura a las diferencias. En este sentido, el concepto de inteligencias múltiples nos abre todo un espectro para salir de los calificativos o los encasillamientos como dislexia, hiperactividad, bajo coeficiente, etc. Frente a esta situación, la pedagogía sistémica nos propone cambiar la mirada hacia el alumno, verlo junto a sus padres con sus situaciones de vida, sin juzgarlos. Cuando puedo incluir su historia, él va a poder crecer y los docentes podrán evitar las situaciones de burn out que se genera cuando el este pretende transformar su función pedagógica en terapeútica.
La jornada culminó con la afirmación de que la única manera de cambiar es cambiando nosotros mismos, siendo protagonistas y responsables de nuestras vidas. Citando a Carl Rogers: “la paradoja del cambio es que tengo que aceptarme tal cual soy para poder cambiar”.
Más datos:
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